Peligros de la soja

Peligros de la soja: Actualmente la soja se ha ganado un puesto muy importante en el mundo de los vegetarianos y veganos. Se trata de una legumbre que ha sido considerada como un súper alimento, esto porque cuenta con una gran cantidad de proteínas y aminoácidos esenciales. Al contener dichas propiedades, es el alimento principal de los miles de millones de no consumidores de carne.

Pero de lo que no se habla es de los peligros de la soja y la repercusión que trae para el organismo. Por ello si tienes alguna duda de consumir o no esta legumbre, sigue leyendo y te lo contamos todo.

¿Qué es la soja?

Se trata de una leguminosa que es consumida principalmente en Japón, y actualmente se puede encontrar como múltiples alimentos. La soja está caracterizada por contener nueve aminoácidos esenciales, ideales para el organismo. Si hablamos de sus aportes en el consumo se dice que 100 gramos de soja en habas, ofrecen 127 kilocalorías, 5 gramos de grasas, 10 de hidratos de carbono, 12 proteínas y 4 gramos de fibra. Por lo tanto es considerada la principal fuente de proteína vegetal, sin incluir los beneficios para la salud a los que se relaciona.

Composición de la soja

• Proteínas
• Aminoácidos esenciales
• Lecitina
• Grasas poliinsaturadas
• Hidratos de carbono
• Fibra
• Vitamina A
• Vitamina B1, B2, B6
• Ácido nicotínico
• Trazas de vitamina C

De igual forma la soja cuenta con una buena proporción de hierro, calcio, isoflavonas y demás minerales. Es por esta equilibrada tabla de propiedades, que en los años 80, se llegó a considerar el alimento del futuro. La soja de un tiempo para acá comenzó a cultivarse de forma masiva, comenzando así la sojización y creando una industria de alimentos que se encuentran en todos los mercados del mundo. Se puede llegar a encontrar alimentos como: cereales, barras energéticas, galletas, bollos, bebidas, carne, entre otros.

Peligros de la soja: veamos cuáles son

Peligros de la soja para la salud

Al ser un alimento tan poderoso, se ha convertido en una controversia, el poder investigar y decir de sus beneficios y peligros. Sin embargo, los estudios que se han realizado han demostrado, que el consumo de la soja puede causar deterioro del sistema inmune, trastornos digestivos, desnutrición, disfunción tiroidea, trastornos reproductivos, enfermedades cardíacas e incluso cáncer. Sin embargo, los efectos nocivos de la soja, se evidencian propiamente de los productos de soja no fermentada, dando un alto nivel a los productos fermentados como el tempeh, natto y la salsa de soja.

Entonces, se cree que la soja puede ser perjudicial para la salud ya que cuenta con diferentes sustancias que perturban los equilibrios hormonales. La problemática surge en medio del procesamiento del alimento, ya que no se eliminan los componentes dañinos, sino que más bien añaden otro tipo de sustancias dañinas para la salud. Muchos estudios se han encargado de pregonar que a pesar que no se trata de un alimento transgénico, causa diversas patologías en el cuerpo humano. Así mismo, aseguran que la industria detrás de este alimento se ha encargado de exaltar sus beneficios, ocultando los posibles riesgos a la salud.

La soja y las isoflavonas

Las isoflavonas es un componente principal de lo que es la soja, el cual trata de un compuesto fenólico, que se traduce como fitoestrógeno. Ahora bien, se ha determinado que el efecto peligroso que puede generar las isoflavonas va a depender del metabolismo de cada individuo. Sus efectos estarán relacionados sus bacterias intestinales, tránsito intestinal, ph intestinal, edad de la persona, su dieta, uso de medicamentos/drogas, entre otros.

Entonces, según estudios en mujeres con alto consumo de soja, se ha determinado que cuentan con desequilibrio en su ciclo menstrual, inhibición de hormonas tiroides, infertilidad, daño hepático, colon irritable, aumento de peso, entre otros. Inclusive sobre animales se evidenció que al incorporar en su comida, provocaba severos trastornos. Por otro lado, en hombres se asevera que produce enormes efectos negativos como: baja de la libido, aumento de peso, infalibilidad, disminución de esperma, entre otros. Tanto así que se considera un alimento primordial en monasterios orientales, para sosegar el deseo sexual. Algunos de los efectos de las isoflavonas en la soja son:

• Insuficiencia pituitaria
• Deficiencia inmune
• Alteración de conducta, pérdida de memoria y disminución de la percepción.
• Tiroiditis autoinmune o hipotiroidismo.
• Desorden en el aparato reproductor o infertilidad.
• Abstención de hormonas T3, T4 y esteroides.
• Insuficiencia hepática

A pesar de tener en cuenta esta fuerte evidencia, la industria se encarga en su defecto de resaltar los beneficios de la soja, como el uso para disminuir el colesterol o para evitar y resolver problemas con la menopausia. De igual forma en el mercado se pueden encontrar formulas para niños y bebés que son alérgicos a leche vacuna. Diversos ministerios de la salud han prohibido/recomendado no suministrar fórmula o leche de soja a los bebés y mujeres embarazadas

La soja y los casos de hipotiroidismo

El padecimiento del hipotiroidismo se manifiesta en el déficit de producción de la hormona tiroidea. Esta hormona es la que trabaja como un regulador de nuestro organismo, por lo que al no contar con su función, se evidencia una significativa desproporción corporal. Las isoflavonas también juegan un papel fundamental en la disminución de la hormona tiroidea, ya que son disruptores endocrinos fitosanitarios. En el caso de los pacientes que ya cuentan con hipotiroidismo, deben consultar con su médico, en caso que quiera realizar su consumo, ya que ésta interfiere de forma clara con los medicamentos que proporcionan las hormonas sintéticas tiroideas.

La soja y el cáncer

La controversia de la soja en relación al cáncer, se deriva a su componente polémico, las isoflavonas, que se han comparado con los estrógenos. De igual forma la controversia del tema también se relaciona con la soja texturizada. Esto es debido a que el estrógeno genera un severo desequilibrio de las hormonas y también se puede encontrar elevadas dosis del mismo en la sangre. Ahora bien, esto puede llegar estimular el crecimiento de las células cancerígenas, cuando el cáncer ya está desarrollado.

De esta forma es que se eleva el peligro del crecimiento de los tumores, además que se transforme en una posible metástasis y dañe a los órganos funcionales. Este es el gran temor que muchos médicos, científicos y estudiosos, tienen en cuanto a las isoflavonas de la soja y los pacientes con cáncer. Pero, ¿por qué sucede esto? Todo esto ocurre cuando se realiza el proceso de texturización, es decir, se pasar por una alta temperatura, luego por presión y finaliza con la deshidratación. En el proceso de secado de la soja, se generan nitritos, lisinoalanina y otras diversas sustancias cancerígenas. Además de esto deben agregar aromas artificiales, y fuertes saborizantes para imitar el sabor de la carne.

Efectos nocivos o peligros de la soja al consumir grandes cantidades

Toma en cuenta que la mayoría de la soja que llega a nuestra mesa es de origen transgénico, es así como sus productos derivados pueden llegar a ser más tóxicos y con más elementos químicos. Por ello, te presentamos algunas consecuencias que podrías tener:

• La soja es uno de los productos con mayores casos de alteraciones alérgicas y reacciones graves en el cuerpo.
• Los estudios realizados en este campo derivan que existen significativas alteraciones en el sistema nervioso, además de la prontitud del envejecimiento cerebral. Esto se demostró en un estudio con un caso de consumo diario de la soja del doble de lo establecido. Las personas mayores que tienden a incrementar su consumo de soja pueden acelerar que sus capacidades cognitivas se disminuyan, dando paso a enfermedades como la demencia o el Alzheimer.
• El estrés y la ansiedad comienzan a aumentar, además que disminuye el deseo de interactuar socialmente. También se evidencia el desarrollo del comportamiento agresivo al momento de socializar.
• La soja puede llegar a bloquear la absorción del calcio, lo que produce una deficiencia de la vitamina D, que es importante para los adultos mayores y para la conservación de los huesos.
• En el caso de las mujeres embarazadas el consumo excesivo de este alimento así como de sus productos derivados, puede desarrollar malformaciones en el bebé. Se pueden desarrollar sin espina bífida, con ausencia de órganos o con deformidades en sus extremidades.
• La alopecia también es un evidente efecto nocivo que puede generar el consumo exagerado de la soja. Se puede generar la pérdida de cabello, perdida del volumen o densidad capilar.
• La soja también cuenta con un elemento que es trascendental, el cual es la genisteína. Esta es una proteína, que puede generar alteraciones de la tiroides y el páncreas. Toma en cuenta que al contrario de la mayoría de los casos mencionados los problemas de tiroides no son reversibles. Así mismo, la genisteína genera efectos inmunosupresores, lo que quiere decir que reduce la función que tiene por naturaleza el sistema inmune.

¿Cómo afecta la soja a los hombres?

A pesar que las isoflavonas otorgan al cuerpo de las mujeres una gran cantidad de beneficios si se consume con regulación, los efectos que da a los hombres es totalmente diferente. Los compuestos de isoflavonas no actúan según el sexo, por ello en el sistema de los hombres se interpreta como si estuvieran recibiendo más estrógeno. En cuanto a la fertilidad masculina se ejerce un resultado negativo en la concentración de esperma. Un estudio de la Universidad de Harvard en el 2011, se encargó de encontrar los efectos nocivos del consumo de productos derivados de la soja en los varones.

Dicho estudio, escogió a un sujeto con una dieta vegana estricta específicamente y se encargaron que tuviera una ingesta de 360 mg de isoflavonas de sojas diarias. Tomando en cuenta que en los países occidentales el orden del consumo habitual de este alimento es de 2 miligramos al día. En cuanto a este sujeto los estudios evidenciaron pérdida de la libido, niveles de testosteronas muy bajos y disfunción eréctil. Como solución luego de un año al retirar la dieta de soja, el paciente restableció su función sexual.

Toma en cuenta que se trata de un caso extremo y muy específico, es decir que no existe una evidencia exacta que en los hombres veganos se exprese una disminución de la libido o disfunción eréctil. De igual forma, si se puede asegurar que las isoflavonas de la soja generan diversas reacciones adversas en los hombres, que se deben tener muy en cuenta al momento de su consumo. Ver Remedios caseros para aumentar la potencia masculina

Cómo se debe consumir la soja

Dentro de una dieta donde se incluye la soja, su consumo ideal es de 6 a 10 gramos de soja al día, con el fin de consumir entre 20 a 50 mg de isoflavonas diarias. De igual forma se recomienda consumir con intervalos, es decir 3 veces por semanas o distribuyendo de forma parecida su consumo. Consumir esta cantidad de proteínas se traduce en ejemplo: 35 gramos de carne de soja cruda, que al cocer se incrementa en 100 gramos, 125 gramos de tofu o 400 ml de leche de soja o cualquieras de estas opciones diarias.

En caso de querer consumir dos de estas opciones, se recomienda elegir la mitad de las dos porciones, por ejemplo: 18 gramos de carne de soja y 63 gramos de tofu, o 200 ml de leche de soja y 63 gramos de tofu. Ahora si quieres consumir los tres productos al día, serían 12 gramos de carne de soja cruda, 42 gramos de tofu y 130 ml de leche de soja.

Lo importante a tener en cuenta, es que no debes pasarte de los 50 miligramos de isoflavonas al día. Encuentra un balance de nutrientes adecuados en relación a tu dieta vegana o en caso que quieras incluir la soja en tu alimentación tradicional.

Conclusiones sobre los peligros de la soja

La soja es un alimento que cuenta con innumerables beneficios para el cuerpo. En general puede decirse que es segura, sin embargo se debe controlar la cantidad que quieras ingerir. Toma en cuenta que en la industria de la soja, los fabricantes esconden conflictos económicos y de estrategias, donde la salud no se ve incluida.

Es recomendable que comiences consumiendo productos de soja fermentados como el natto, miso, salsa de soja o tempeh. Por último, si quieres comenzar a hacer cambios en tu salud, primero consulta con un nutricionista que te guíe es tus decisiones.