¿El amoníaco desinfecta?

En la actualidad con tantos virus y bacterias que rondan el ambiente, se está en la búsqueda del mejor producto de limpieza que ayude a desinfectar los espacios. En cuanto a la limpieza y la desinfección se escuchan a algunas personas decir que un producto ideal para este objetivo es el amoníaco. ¿Quieres saber qué es el amoníaco, para qué sirve y cómo lo puedes utilizar? Pues sigue leyendo que a continuación te explicamos todo.

¿Qué es el amoníaco?

Se trata de un químico que está compuesto por NH3, es decir átomo de nitrógeno y 3 de hidrógeno por molécula. Cuenta con un olor particularmente fuerte, por lo que en los productos de limpieza con este componente, se suele añadir un perfume que contrarreste este olor. Se trata de un producto alcalino que al utilizar puede causar irritación en la piel, ojos y garganta, además a largo plazo ocasiona lesiones respiratorias.

El amoníaco para la limpieza del hogar

El producto tradicional que se usa para limpiar y desinfectar las superficies, siempre ha sido la lejía. Ya que es un producto con buenas propiedades especialmente para asear. Pero, cuando se trata de limpiar, el amoníaco juega un papel muy importante y eficaz. Este concentrado de hidróxido de amonio, está caracterizado en el sector de la limpieza por sus propiedades desengrasantes, limpiadoras y desinfectantes sobre una variedad de superficies.

El amoniaco es el producto perfecto para tener dentro del kit de limpieza. En especial tiene excelentes propiedades para quitar las manchas, desengrasar y desinfectar las superficies. Una vez manifestado el reciente estado de alarma debido al COVID-19, la lejía junto con el amoníaco se catalogaron como los mejores productos para proteger las superficies de cualquier infección.

Este producto es utilizado para:

• Desinfectar cristales, ventanas, cuadros, televisores, lámparas, superficies metálicas, cromadas, sintéticas e incluso plástico.
• Se utiliza para tratar las superficies que sufren de manchas recurrentes.
• Elimina manchas de los tejidos blancos, por lo que puede utilizarse en combinación con el detergente.
• Para desinfectar áreas ventiladas.

¿Cómo utilizar el amoníaco para desinfectar?

Como ya lo mencionamos se trata de un producto químico de mucha potencia, por lo que para utilizarlo es necesario diluir primero en agua. La otra forma de utilizarlo es mediante versiones comerciales que ya estén diluidas y su potencia no sea tan abrasiva. La idea antes de utilizar el amoníaco es que se reduzca su poder corrosivo y volatilidad.

Para utilizar de forma correcta el amoníaco se deben seguir los siguientes pasos:

• Ventilar lo más que se pueda el área donde se va a utilizar el amoníaco. Por lo que es necesario abrir ventanas, puertas y cortinas.
• Para desinfectar y limpiar se recomienda que se haga en horas donde los espacios estén vacíos. Esto hace que los vapores no afecten el organismo. Es un producto que también puede afectar a tus mascotas.
• Utiliza guantes de látex con el fin de proteger tu piel. Evita el contacto directo con cualquiera de las versiones de este producto.
• No excedas el uso de las cantidades de amoniaco. Basta combinar un chorro en un balde de agua.

Nota: nunca por nada del mundo es recomendable mezclar la lejía con el amoníaco, al igual que otros productos químicos. Estas combinaciones suelen ser realmente peligrosas para el medio ambiente y tu salud en general. La combinación del hipoclorito sódico de la lejía y el hidróxido de amonio pueden llegar a ser fatales para los ojos y los pulmones.

Diferencias entre el amoníaco y la lejía: ¿El amoníaco desinfecta?

El amoníaco o hidróxido de amonio, está caracterizado por tener un olor muy fuerte y ser utilizado por su acción desengrasante. Es ideal para los suelos de cocinas. En relación a los tejidos, ayuda a combatir sus manchas tanto en tejidos, alfombras y tapicerías. A diferencia de la lejía no deteriora o decolora los tejidos.

En el caso de la lejía, también tiene un fuerte olor, pero no es tan penetrante como el amoníaco. Este particularmente tiene propiedades desinfectantes, ya que elimina un gran porcentaje de bacterias en las superficies. La lejía tiene la función de ser oxidante y blanqueadora, por lo que actúa de forma dañina sobre materiales y tejidos. Este producto es utilizado para suelos, que explícitamente necesitan desinfección apropiada.

Si hablamos de desinfección eficiente se puede decir que el producto ideal para ello es la lejía. El amoníaco, si cuenta con propiedades desinfectantes, pero no es tan eficaz en comparación con la lejía. El amoníaco se utiliza en la mayoría de los casos en superficies donde la desinfección no es tan requerida, solo la limpieza en general.

Usos del amoníaco en el hogar

Se trata de un producto perfecto para la limpieza en general de los espacios, por lo que es muy eficiente utilizarlo de forma doméstica e industrial. A continuación mencionamos los diversos usos del amoníaco en el hogar.

• Es ideal para utilizar como un fuerte arranca grasas, por lo que es un producto muy efectivo para utilizar en la limpieza de restaurantes y cocinas domésticas.
• El amoníaco es muy bueno para la limpieza de superficies acristaladas, por lo que sirve de forma eficaz en objetos de cristal, ventanales y similares. Retira muy bien las manchas y las huellas que se adhieren al vidrio.
• También actúa de muy buena forma sobre las superficies de los baños, como los azulejos. Retira muy bien el moho y la grasa que se acumula en las tinas. En cuanto al lavabo y al water, funciona muy bien para eliminar las capas amarillas que aparecen con el tiempo.
• Se trata de un producto muy bueno para utilizar sobre los tejidos, es mucho más delicado que la lejía y elimina las manchas al 100%.
• El amoníaco también es ideal para trabajar sobre los tejidos más corpulentos como lo son las alfombras y moquetas. Elimina muy bien la suciedad y los líquidos derramados.
• Los malos olores relacionados a la humedad y el moho, también se rinden ante la eficacia del amoníaco. Para ello solo se debe mezclar con un poco de agua y restregar muy bien.
• Es un producto ideal para limpiar las piezas de cobre y bronce como los adornos. Para ello solo debes mezclar un poco de amoníaco con agua tibia y frotar muy bien la superficie de dichos objetos. Podrás recuperar rápidamente la belleza y brillo de estas piezas.

Fuentes:

• www.elmueble.com/orden-limpieza-ahorro/amoniaco-desinfecta_46266
• www.hostelarium.es/lejia-amoniaco-desinfectar
• www.ventaproductosdelimpieza.es/default.aspx?tabid=26444&rowid=1532179,63828
• www.msn.com/es-es/salud/nutricion/el-amoniaco-desinfecta/ar-BB1aJMvg?li=BBS36iA
• www.chemicalsafetyfacts.org/es/amoniaco/