Cinco errores que están acabando con tu motivación: EVITALOS!
La motivación es posiblemente uno de los factores más decisivos en nuestra vida: de ella dependen en buena parte nuestro éxito y felicidad.
Pero seguramente a tí también te habrá pasado: haces planes, te llenas de buenos propósitos, te pones metas concretas, todo luce de maravilla, sabes que lograrás alcanzar mucho… sin embargo pasa el tiempo y sigues allí, en el mismo sitio, sin haberte movido un ápice…
Qué es lo que ha pasado? Si tus planes eran tan buenos!
Muy probablemente sufras de un mal muy pero muy frecuente: la falta de motivación!
Y no estamos hablando de las ganas de hacer algo, de ponerte metas… eso ya estaba dado. Nos referimos a esa fuerza que te lleva día a día a luchar por tus metas, a llevar tus deseos a la acción!
Para ayudarte a salir de esta situación tan negativa hoy queremos hablarte sobre cinco graves problemas que debes reconocer como tales y solucionar ya mismo!
1. Problema número uno: has fijado mal tus metas
Puede que suene obvio, pero es un error más frecuente y grave de lo que parece a primera vista. Al ponerte metas nunca, pero nunca olvides darle a tu cerebro las señales adecuadas.
Al plantearte una meta debes siempre acompañarla del por qué!!
Por ejemplo:
de nada sirve plantearte que vas a montar un negocio paralelamente a tu trabajo como empleada o empleado. A pesar de ser esta una meta loable, tu cerebro no tendrá la motivación necesaria para empujarte a trabajar en ello cuando se haya echo tarde y la alternativa sea sentarte en el sofá a ver televisión o a distraerte con tu móvil…
No! A tu cerebro debes decirle algo como: quiero montar un negocio y hacerlo crecer para poder irme de vacaciones con mi familia con más frecuencia sin preocuparme por los costos!
O: este negocio me permitirá comprarme el automóvil de alta gama que me merezco!
Esas son las señales que de verdad motivan a tu cerebro.
2. Problema número dos: esperar a que llegue la motivación
Ya decíamos que la motivación es importantísima… y sí que lo es! Pero seamos realistas, ella no estará siempre ahí, acompañándos y llevándonos a la acción.
Por eso es necesario que acompañes tus metas con planes de acción concretos, planes mensuales, semanales y hasta diarios. Así sabrás lo que debes hacer sin esperar a que llegue la motivación. Cíñete a tu plan y verás que las cosas irán tomando forma, aún en los tiempos en los que la motivación ande baja…
Además, a medida que se vayan acercando tus metas tu motivación crecerá, no lo olvides!
3. Problema número tres: el perfeccionismo
No creas que nos referimos simplemente a que quieras hacer bien las cosas, eso en realidad no es un problema… el perfeccionismo implica no hacer las cosas por temor a no poder hacerlas perfectamente, o a perderse en detalles sin importancia!
Mira el perfeccionismo como una excusa para no llegar a la acción. Recuerda mejor hecho que perfecto!!
4. Problema número cuatro: la inseguridad
Tendemos a creer que cuando no se trabaja en las metas propuestas tenemos un problema de disciplina. La verdad es que en muchos casos el problema real es la inseguridad!
En muy normal que al hacer algo nuevo nos sintamos inseguros. Pero no te dejes llevar por ese sentimiento! No dejes de enfocarte, trabaja en lo tuyo a pesar de ese sentimiento de inseguridad: sé conciente que que es algo abolutamente natural y comprensible!
5. Problema número cinco: falta de enfoque
Como decíamos hace un momento, al sentirmos inseguros podemos perder fácilmente el enfoque.
Lucha contra esta falta de concentración, no te dejes llevar por pensamientos sobre otros temas o sobre el futuro. Vive el aquí y el ahora y mantente en tu plan!
…
Seguramente que el tener en cuenta estos cinco consejos te ayudará a alcanzar tus metas! No lo pienses tanto y pasa a la acción, tu superación está en tus propias manos!